Recargar Yoigo ®

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¿Cómo puedes hacer una recarga online de mi tarjeta Yoigo?

Hacer una recarga de tu teléfono Yoigo por internet nunca ha sido tan fácil, no necesitas ni registrarte en el canal clientes, basta con rellenar el formulario que aparece en la parte superior derecha de esta página, indicar el importe del saldo que quieres recargar y pagar con tu tarjeta de crédito (VISA, MasterCard,...), en unos minutos un sms llegará a tu móvil confirmándote el pago de la recarga Movistar que has realizado.

✓ Rápido porque la recarga te llegará al instante.

✓ Fácil porque en tres pasos tu recarga está realizada.

✓ Recarga Sin Registros

✓ Desde 5€ hasta 50€

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¿Cómo puedes consultar mi crédito o saldo de Yoigo?

Para saber el crédito o saldo de Yoigo que dispones, dispones de dos opciones:

• Opción 1
  1. Marca *111# en tu móvil 
  2. Pulsa botón de llamada
  3. Se mostrará tu saldo disponible
• ​Opción 2
  1. ​​Llama al 622 
  2. Te dirán el saldo que tienes 

¿Caduca el crédito de tu Yoigo?

El saldo de Yoigo no tiene fecha de caducidad, pero debes tener en cuenta que, si no usas el crédito de tu Yoigo durante seis meses seguidos, la tarjeta se desactivará.

Si dispones una Tarifa de Tarjeta sin consumo mínimo obligatorio, para que no se desactive, deberás hacer, como mínimo cada 9 meses, una recarga de 5 €.

¿Cómo  puedo contactar con Yoigo?

Llamando a Yoigo al 622 62 26 22 desde cualquier teléfono fijo o móvil
Si llamas desde fuera de España deberás marcar 0034 622 62 26 22

Pero recuerda, en esta misma web, puedes hacer online una recarga de tu tarjeta Yoigo de forma directa para que no te quedes sin saldo en el móvil.

Historia de Yoigo: Un Operador Serio y Eficaz

La de Yoigo fue la cuarta licencia concedida de telefonía móvil 3G (tercera generación) concedida en el año 2000. Sin embargo, no fue hasta el 1 de diciembre de 2006 cuando esta empresa pudo comenzar a operar en España.

¿Qué razones provocaron ese retraso?

Comencemos desde el principio: la idea de un cuarto operador interesaba debido al gran potencial que presentaba el mercado español, al que ya en el año 2000 el teléfono móvil se le hacía imprescindible pero que en aquellos momentos  ofrecían tarifas elevadas al no existir prácticamente competencia. Yoigo quería apostar por la tecnología 3G y romper esa tendencia, estableciendo tarifas muchos más accesibles. No pudo hacerlo sin embargo en el momento de la concesión, ya que dicha tecnología aún no estaba preparada para España, por lo que su proyecto estuvo congelado durante casi seis años.

 ¿Quiénes estaban detrás del proyecto Yoigo?

Yoigo proviene de Xfera, un conglomerado de empresas, formando entre otros por la unión de la líder (por aquel entonces) en telefonía sueca Telia y la honónima Sonera finlandesa. Esa unión se hace al principio con el 17% pero, tras algún tiempo, decide invertir más y quedarse con el  76% mediante la compra de acciones a otros accionistas, noticia acogida con estupor en los países de origen de Xfera y con buenos auspicios desde España.

Se fijó una fecha, el 1 de diciembre de 2006, para que la telefonía móvil en España contara con un cuarto operador; para conseguirlo se nombró a un nuevo CEO, de tan solo 33 años de edad, Johan Andsjo. Él apostó por una nueva forma de gestionar el negocio, externalizando la mayoría de los servicios, lo que conllevaba, por un lado el abaratamiento de los costes y por otro el aprovechamiento de la experiencia de los proveedores en esas determinadas áreas de servicios. Este nuevo modelo tenía un objetivo: crear en España la primera compañía de telefonía móvil low cost, tanto en línea como en recargas de móvil.

Para potenciar la nueva idea y el branding, Xfera se transformó en Yoigo, con una imagen más dinámica y más cercana que su antecesora. Logo, tipografía, imagen... todo se transformó. Para elegir el nuevo nombre se barajan más de 100 posibilidades; la elección debía sopesarse bien para transmitir el mensaje de la nueva compañía: transparencia, honestidad, honradez, sencillez, innovación (se eligieron cuatro colores en el logo con el afán de destacar entre sus competidores) etc.

Para el lanzamiento de Yoigo se invirtió en una gran campaña mediática en el que querían transmitir que Yoigo no era simplemente el cuarto operador aterrizado en España, sino el primero que por fin hablaba claro, sin letra pequeña, informando con detalle y sin recovecos sobre su producto.

En un principio, Yoigo basó su actividad comercial ofreciendo venta directa telefónica y mediante acuerdos con ThePhoneHouse, aunque más tarde y pese a la crisis, apostó por abrir tiendas propias en las principales ciudades españolas (hasta mil tiendas en dos años).

Los comienzos no fueron fáciles; de hecho, debido a la gran demanda, hubo retrasos en la entrega de terminales y su campaña llamadas a coste cero les dio más de un disgusto. Comenzaron a sonar voces que hablaban de la venta de Yoigo, aunque desde la compañía sabían que, la comprase quien la comprase, Yoigo había llegado a España para quedarse.

La otra apuesta de Yoigo fue la de bajar los precios en las tarifas de llamadas y recargas de móvil, precios que hasta el momento no se habían conocido en el mercado español: la tarifa del 8, la de 6 céntimos por llamada, etc. Además la compañía se volcó en ofrecer un excelente servicio al cliente a través de su call center, servicio que en el año 2010 estaba valorado como el mejor de entre todos los operadores.

Estas estrategias consiguieron que a finales de ese mismo año, 2010, Yoigo ya ofreciera, tras tan solo  años, resultados económicos positivos , tendencia que mantuvo hasta la llegada de la convergencia. Cuando Movistar apostó por ofrecer en la misma factura el teléfono fijo y el móvil, comenzaron a surgir los baches en el camino de la compañía más joven con red propia, Yoigo, perdiendo líneas de portabilidad.

¿Podrá remontar y de nuevo aportar resultados positivos en su balance de cuentas? 

Esperemos que si, ya que su Seriedad es una garantía para los usuarios.